Las catas de vinos pueden tener muchos beneficios, entre ellos:
Desarrollo sensorial: Las catas ayudan a desarrollar la capacidad de percibir y diferenciar aromas y sabores.
Conocimiento sobre el vino: Las catas permiten aprender sobre las variedades de uva, las regiones vinícolas, los procesos de elaboración y el maridaje.
Exploración de estilos: Las catas permiten descubrir nuevas preferencias y ampliar el paladar.
Socialización: Las catas son una oportunidad para conocer a otras personas con intereses similares.
Selección informada: Las catas permiten tomar decisiones más informadas al elegir un vino.
Aprender sobre la cultura: Las catas permiten aprender sobre la cultura y diferenciarse de los que ven el vino como un producto alcohólico más.
Mejorar la salud: El vino tiene propiedades que ayudan al correcto funcionamiento del sistema cardiovascular